La leche como factor de estabilización para los camelleros de la zona periurbana de Yamena (Chad)

Resumen

Las condiciones climáticas, acentuadas por la inestabilidad política de los años 70–80, transformaron las trayectorias de los hogares pastorales. Dejaron su región originaria, Batha, para instalarse en la zona periurbana de Yamena. Durante la migración, transformaron profundamente sus sistemas de ganadería. El objetivo de este estudio es mostrar cómo la cría del dromedario fue un resorte para estas transformaciones y permitió la resiliencia de las familias de pastores. El trabajo consistió en una encuesta realizada en 2018 a 173 hogares de pastores camelleros, distribuidos en 27 campamentos alrededor de Yamena, es decir, al 10 % de los hogares de estos campamentos. Estas familias están especializadas en la cría de camellos para leche, y su movilidad se organiza alrededor de tres zonas agroecológicas. Durante la estación seca los rebaños se dividen en dos. Las hembras en lactancia permanecen alrededor de Yamena para la venta de la leche, y el resto del rebaño se envía hacia una zona pastoral del sur con un adulto joven. En cambio, durante la estación de lluvias el conjunto del rebaño remonta hacia el norte con todos los miembros del hogar. La venta de leche de camella, que antaño era considerada como un tabú social, representa actualmente un recurso para la estabilidad económica de estos hogares de pastores, y cuenta con cuatro modalidades de comercialización. Se trata de la venta a los distribuidores de leche (43 %), la venta al borde de la carretera (35 %), la venta en la ciudad con recogida de leche (12 %) y la venta en la ciudad sin recogida de leche (9 %). El autoconsumo de leche también es importante (3,5 litros al día por hogar). La leche es además una fuente importante de ingresos: más del 45 % de los hogares obtiene un margen de beneficio bruto de leche (MBL) por activo superior o igual al salario mínimo interprofesional garantizado (SMIG), que es del orden de 2 000 francos CFA al día.