Análisis de las prácticas de detección de celos en los criaderos de bovinos de leche argelinos

Resumen

Se realizó una encuesta sobre las prácticas de deteccion de celos en 222 establecimientos bovinos, repartidos en cinco regiones (wilayas) del centro de Argelia (Tizi Ouzou, Blida, Medea, Tipaza y Bouira). El cuestionario utilizado contenía informaciones generales, relativas al criadero (número de hembras, estabulación, especialización), así como también las prácticas de detección de calores (periodo de observación, signos observados) y los medios complementarios eventualmente utilizados. La mayoría de los criadores (57%) estuvieron confrontados a un problema de detección de calores. Únicamente en 49% de los casos se inseminó a las vacas, por la primera vez, 50 a 90 días post parto. Uno de cada dos criadores (53%) detectaba los celos dos veces por día y 40% los observaban tres veces por día, esta actividad se efectuó de manera aleatoria. La verificación del estro se basaba principalmente sobre la presencia de una descarga de la vulva (19%) o sobre la aceptación de la monta (16%). El tamaño del hato o la especialización no tuvieron influencia sobre la frecuencia de los signos considerados. Las vacas que no presentaron signos de calor durante los primeros 60 días post parto fueron objeto de un examen clínico por parte de un veterinario en 76% de los establecimientos. Los medios complementarios de detección, como el calendario rotativo o el lápiz detector fueron utilizados solamente por 34% de los criadores. Los factores responsables de la manifestación de los calores, los momentos y el número de observaciones, el examen de anestro post parto y la utilización de medios complementarios, fueron influenciados por la especialización y el tamaño del establecimiento, contrariamente a los signos de calor, el periodo de espera y la dificultad de detección.